Cuidados paliativos y oncología

¿Realmente la psicología puede ser de ayuda en una enfermedad como el cáncer?
Atravesar una enfermedad como el cáncer, desde su diagnóstico hasta el sufrimiento de pruebas y tratamientos altamente invasivos, supone un fuerte impacto sobre la salud mental de paciente y sus familiares.
La persona diagnosticada no sólo ve su autoestima comprometida ante los cambios que experimenta su cuerpo – caída de pelo, pérdida de peso, dependencia para actividades básicas… -. Además, la incertidumbre en la evolución de la enfermedad se convierte en un importante foco de problemas depresivos y de ansiedad.
Y para los familiares… ¿de qué sirve?
Los familiares se sienten responsables del cuidado físico y mental del ser querido, llegando a abandonar el propio autocuidado personal y experimentando vulnerabilidad ante el compromiso de acompañar al paciente en la toma de decisiones sobre su salud.
En este contexto, la terapia psicológica contribuye a proporcionar un espacio seguro para pacientes y familiares, en el que poder trabajar sus miedos e inseguridades, así como a adaptarse de la mejor manera posible al impacto de todo el proceso oncológico.